Lo que no sabías sobre kokedamas

Suele ocurrir que mucha gente piense que estamos hablando de una planta, pero te sorpenderá saber que no es así. Le llamamos kokedama a la técnica donde se elimina la maceta y el sustrato de una planta y se sustituye por una bola arcillosa que retiene el agua.

 La bola se forra de musgo, dando como resultado una “maceta natural” muy decorativa y estimulante que rompe nuestros modelos mentales de recipiente para plantas. Entonces, una kokedama puede contener varios estilos de plantas, dependerá de vos elegir el que más te guste para decorar tu hogar. 

 Las Kokedamas ayudan a purificar el aire y se rumorea que tienen la capacidad de reducir el estrés. Pueden humedecer el espacio en el que se hallen, creando un efecto benéfico para la piel. Estas plantas absorben los contaminantes que se encuentran en el ambiente y disminuyen el ruido. Por eso son una opción ideal para dar un toque natural a espacios cerrados o reducidos, aunque también se pueden ubicar en lugares más amplios, dentro o fuera del hogar.

 Las Kokedamas son fáciles de mantener ya que no requieren cuidados especiales. El riego se realiza por inmersión. Cuando se nota que la bola de musgo pesa poco, hay que introducirla en un recipiente con agua y cubrirla dos dedos por encima del nivel, sujetándola con las manos hasta que deje de hacer burbujas. Después se escurre y se vuelve a colocar en su sitio. Cada cierto tiempo habrá que rehacer la bola de musgo, sobre todo si la planta va creciendo. Es conveniente no exponerlas directamente al sol para no quemarlas, aunque sí requieren un espacio iluminado. Cuidados como la luz, la humedad o la frecuencia de riego dependen del tipo de planta.

 Si se cuida bien, su vida puede alargarse durante años. Esta antigua técnica japonesa existe en infinita variedad de plantas y puede ir tanto en una pequeña bandeja, como colgado de un árbol. 

Muchas veces decimos que las Kokedamas son tan interesantes ya que son plantas que podemos tocar. Podemos sostenerla entre nuestras manos, mostrársela a nuestros amigos y conectar con sus raíces. 

Es una planta que requiere tacto para su riego, su forma y mantenimiento, esto genera un sentimiento de conección que nos lleva a querer a esta plantita todavía más.