Un campeón de la supervivencia. El kalanchoe.
Aprende a cultivar kalanchoe ya fomentar su floración con estos cuidados esenciales.
Descubre las especies más populares y cómo lograr que tu planta florezca durante mucho tiempo
Especies populares de kalanchoe
1. Kalanchoe Blossfeld: Originario de Madagascar, famoso por sus flores coloridas que contrastan con sus hojas verde oscuro.
2. Kalanchoe daigremontiana: Conocido como "caqui de Daigremont", se distingue por sus hojas delgadas llenas de propágulos que parecen raíces.
Cómo cultivar kalanchoe
- Ubicación: Colócalo en un lugar bien iluminado con luz difusa. Toleran el aire seco y prefieren temperaturas moderadas.
- Riego: Deja secar la capa superior del sustrato antes de regar. Evita el encharcamiento para prevenir la pudrición de raíces.
- Fertilización: Durante la temporada de crecimiento y floración, fertiliza cada 2-3 semanas con un fertilizante diluido para plantas con flor o cactus.
¿Qué hacer para que el kalanchoe florezca?
- Ciclo de floración: Es una planta de día corto, por lo que florece cuando los días son más cortos que las noches. Recorta las flores marchitas para promover nuevas floraciones.
Guía detallada para el mantenimiento del Kalanchoe:
1. Ubicación y luz: El kalanchoe es una planta suculenta que prospera mejor con luz indirecta brillante. Debe ubicarse en un lugar donde reciba entre 4 y 6 horas de luz diarias, como cerca de una ventana orientada al este o al oeste. La luz solar directa puede quemar sus hojas y flores, por lo que es importante protegerla de la exposición prolongada al sol fuerte, especialmente en las horas de mayor intensidad.
2. Riego: Una de las claves para el éxito con el kalanchoe es regarlo de manera moderada. Permite que la capa superior del sustrato se seque entre riegos para evitar el exceso de agua, lo cual puede causar la pudrición de las raíces. Generalmente, se recomienda un riego semanal en climas cálidos, reduciendo la frecuencia en invierno cuando la planta entra en reposo.
3. Temperatura y humedad :El kalanchoe prefiere temperaturas cálidas, ideales entre 18 y 24 grados centígrados. Es una planta resistente a la sequía, pero si la humedad del ambiente es muy alta, se debe garantizar que la ventilación sea adecuada para prevenir la proliferación de hongos.
4. Fertilización: Durante la temporada de crecimiento (primavera y verano), fertiliza la planta cada dos o tres semanas con un abono equilibrado para suculentas o plantas con flor. Evita fertilizar en exceso, ya que podría afectar negativamente el crecimiento.
5. Podas y Floración: Para estimular la floración, corte las flores marchitas y las ramas secas. Recuerda que el kalanchoe es una planta de día corto, por lo que florece mejor cuando las noches son más largas. Tras la floración, una poda ligera promoverá un nuevo ciclo de crecimiento.
6. Control de Plagas y Enfermedades: El kalanchoe es susceptible a plagas como pulgones y hongos.
Con estos cuidados, el kalanchoe no solo embellecerá tus espacios, sino que también florecerá de manera prolongada, aportando color y vida a tu hogar o jardín.
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